A diferencia de otras ciudades europeas, en Madrid el tranvía ya no existe (aunque se están planteando volver a implantarlo), pero tienes a tu disposición varios modos de transporte para poder moverte por la gran ciudad.

En cuanto a los autobuses, el viajero cuenta con alrededor de 200 líneas regulares (color rojo) que cubren toda la ciudad, además de otras cuantas que recorren toda la Comunidad de Madrid (color verde). El servicio nocturno de autobuses es especialmente completo y ofrece dos opciones: por un lado, los denominados «búhos», autobuses que parten desde la Plaza de Cibeles hacia diferentes puntos de toda la urbe, y por otro lado, los autobuses que hacen el mismo recorrido que las líneas del metro pero por la superficie.

Sin embargo, la opción de transporte más recomendable es probablemente el metro. Rápido, con muchísimas paradas por toda la ciudad, limpio, seguro y en constante ampliación. Su horario va desde 6 AM hasta 1:30 AM durante todos los días del año. Actualmente, el metro de Madrid está considerado uno de los mejores del mundo.

Puedes adquirir tu «metrobús» tanto en estancos como en las propias taquillas del metro. Un billete sencillo (1 viaje) cuesta 1€ y un billete normal (10 viajes) cuesta 6’40€. También existen los Abonos Turísticos.

Para los más pudientes, existe la opción del taxi. Hay paradas de taxis por toda la ciudad pero los puedes utilizar en cualquier punto, no es necesario desplazarse a una de estas paradas. No obstante, si pretendes coger un taxi de madrugada, ármate de paciencia porque hay pocos y normalmente van ocupados.

Pero si lo que te apetece es simplemente ver la ciudad en su conjunto, lo mejor es subirse a un autobús turístico, ya que además irás escuchando información detallada de cada lugar a través del audio.