El rey Jaime I el Conquistador decidió derribar la antigua gran mezquita de Medina Mayurca para construir una gran catedral dedicada a Santa María, tal y como era costumbre tras la conquista cristiana de una ciudad a los musulmanes. La Catedral de Palma de Mallorca -«La Seu», como la llaman los mallorquines-, es el principal edificio religioso de la isla de Mallorca, en Baleares. Se trata de una catedral de estilo gótico, que se asoma al mar sobre las murallas árabes que protegían la ciudad. Este peculiar emplazamiento, encaramada sobre el malecón y presidiendo el antiguo puerto de Palma, le confiere un carácter único en el mundo.

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Su construcción se inició en 1229, después de la conquista de la isla por la Corona de Aragón, y fue consagrada en 1346, aunque los trabajos continuaron bastantes años después, y no se terminó hasta 1601. Ya en el siglo XX se realizó una reforma en el templo llevada a cabo por el arquitecto catalán Antonio Gaudí, que duró diez años.

Se trata de la catedral con uno de los mayores rosetones del mundo gótico y una de las de mayor altura de la nave entre las de estilo gótico europeas. El gran rosetón central de la cabecera, conocido como el ojo del gótico, presenta un diámetro de alrededor de 13,5 metros. Destaca también por su localización (situado sobre el altar central en la cabecera y no a los pies, como es habitual) y la existencia de una gran estrella de seis puntas (estrella de David) inscrita en él.

En cuanto a los portales, la puerta principal no se encuentra en los pies de la catedral, sino en su fachada sur: el Portal del Mirador, llamado así porque se encuentra en la fachada que mira al mar. El tema representado tampoco es un tema clásico, sino que se trata de «la última cena». La tradición cuenta que el tema fue seleccionado intencionalmente dado el gran número de judíos conversos que habitaban Palma. La idea era hacerles bien visible un tema completamente cristiano (la transformación del pan y el vino). En el portal opuesto se encuentra uno de los mejores ejemplos de escultura gótica en Mallorca: un ángel con las alas desplegadas, obra de Guillermo Sagrera, arquitecto no sólo de la Catedral, sino también de otro de los mejores ejemplos de arquitectura gótica (en este caso civil) de las Baleares: la Lonja de Palma.

La nave central, de 19 metros de anchura, es una de las mayores del mundo. Los pilares que soportan la cubierta pueden ser considerados como una auténtica maravilla arquitectónica desde el punto de vista de la ingeniería. De sección octogonal, muy esbeltos y sin columnillas adosadas, alcanzan la máxima altura permitida (44 metros) por el material utilizado.

A principios del siglo XX el arquitecto Antonio Gaudí dirigió una serie de trabajos destinados a recuperar parte del espacio original. Los principales cambios producidos fueron: la eliminación del coro situado en el centro de la nave, que fue dividido en dos y trasladado a los laterales, colocándolo sobre sendos grupos de columnas; la elaboración de un baldaquino para el altar mayor; la creación de un nuevo púlpito; y la introducción de diferentes elementos ornamentales de diseño modernista.

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