Como ocurre en la mayoría de las ciudades europeas, la ciudad de Vitoria en el País Vasco apuesta desde hace años por la bicicleta como medio de transporte. Dispone de varios kilómetros de carril-bici y de un Anillo Verde para todos aquellos amantes de la vida sana y del deporte a dos ruedas. Al ser una localidad pequeña, la bicicleta resulta un modo muy práctico y ecológico para moverse por ella.

La red de Sendas Urbanas está ideada para dotar a la ciudad de unas vías en las que las formas de movilidad prioritarias sean la peatonal y la ciclista. Estas sendas conectan el centro de la ciudad y los barrios con el área rural y natural del municipio. Los itinerarios diseñados permiten conocer diferentes espacios de interés de Vitoria, tanto desde el punto de vista natural como cultural o monumental.

El Anillo Verde ofrece una serie de recorridos para descubrir los valores naturales y paisajísticos de la urbe. En los alrededores de la ciudad, el parque de Salburúa ofrece la posibilidad de contemplar ciervos y visones europeos. El bosque de Armentia está surcado de senderos donde poder pedalear y el parque de Zabalgana, con lagunas, praderas, pequeñas lomas y cerros, brinda un marco muy variado donde hacer deporte y descansar. También los parques provinciales de Garaio y Landa y la zona de los embalses están acondicionados para los recorridos en bici.

El viajero que no disponga de bicicleta no tiene de qué preocuparse. El Ayuntamiento ofrece un servicio de préstamo gratuito en diferentes puntos estratégicos de la ciudad, desde el mes de abril al mes de noviembre. Además, en los parkings del centro de la ciudad funciona un programa denominado ‘Aparca y pedalea’, que permite utilizar gratis una bici presentando el ticket del aparcamiento.