Una de las citas deportivas del fin de semana es el Gran Premio de España, que se celebra en Montmeló, un circuito mítico, al que se han acercado más de 100.000 personas, que a pesar de alarmismo de la gripe porcina y de la crisis, no han querido perderse esta cita tan especial, que siempre hace que los aficionados españoles llenen las gradas. Los aficionados a la Fórmula 1 llevan esperando todo un año pasa disfrutar de esta carrera tan especial y que tanto gusta a los pilotos.

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Muchos aficionados han venido de Europa, a pesar de la gripe porcina y demás. Nadie quiere perderse esta carrera del mundial de Fórmula 1, porque es sencillamente una de las carreras clásicas que nos encontramos durante el año. Estos viajes de aficionados que han llegado hasta España, es ciertamente positiva, porque se consolida un año más el GP de España, que sigue generando mucho interés por parte de todos. Los aficionados españoles han llegado desde diferentes partes del mundo.

Es una cita muy atractiva desde el punto de vista del turismo, porque asegura una buena asistencia de personas a Barcelona, por lo que los hoteles y restaurantes se benefician cada año. En este año, a pesar de la crisis, los aficionados han llegado igualmente a la ciudad, porque es algo que les apasiona y para lo que están dispuestos a pagar lo que llevan ahorrado en estos meses, precisamente esperando esta carrera tan atractiva. La crisis se dejará notar en las gradas, aunque no de manera excesiva.

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