La verdad que tras el desgraciado accidente del avión de Spanair todo ha sido problemas para la compañía ya que ayer otro de sus vuelos fue retrasado y hubo diversos problemas. Según los técnicos se debían a problemas técnicos como era de esperar.

Lo cierto es que los pasajeros estaban nerviosos y no querían subir al avión. Tras el accidente el nerviosismo entorno a Spanair a crecido y muchos han decidido no volver a volar con esta compañía ya que la ven insegura aunque eso es opinión de algunas personas ya que otras siguen confiando en ella a pesar de todo.

Opciones tienen para volar con otros compañías que consideren más seguras ya que cada uno es libre de hacerlo con la que considere oportuna. De todos modos Spanair está recibiendo muy mala publicidad con estos problemas y desde luego le será complicado quitarse de encima todo esto. Esperemos que todo esto se solucione por el bien de todos y que no se produzcan más problemas técnicos que invite a los pasajeros al nerviosismo.